- Es necesaria la formación laboral de las personas con s.D. En el acceso a cursos de formación laboral normalizados se deben facilitar adaptaciones a sus necesidades educativas especiales y una flexibilización en la exigencia de requisitos para hacer el curso.
- El Empleo con Apoyo es una modalidad laboral muy adaptada a las personas con s.D. y resulta el mejor camino para una vida normalizada dentro de la sociedad. Demandamos subvenciones y ayudas para desarrollar Programas de Empleo con Apoyo, que permitan dotar a las Asociaciones de unos servicios de empleo estables y consolidados. Son necesarias ayudas similares a las que existen para los Centros Especiales de Empleo.
- Son necesarios programas de formación para el/la Preparador/a Laboral y la regulación de esta figura. Demandamos la elaboración de un catálogo de formación y que la figura del/ la preparador/a laboral se reconozca a través de un módulo de Formación Profesional de grado superior.
- En el acceso al Empleo Público, debe cumplirse la cuota de reserva del 5% establecida en el Decreto 93/2006, que regula el acceso a la función pública de la Junta de Andalucía por las personas con discapacidad, y en particular la del 1% establecida para las personas con discapacidad intelectual. Para que esta cuota de reserva adquiera efectividad, las pruebas selectivas deben ser moduladas, adaptadas y orientarse a que la persona con discapacidad demuestre su capacitación para desempeñar las tareas propias del puesto de trabajo al que aspira. Por ello, reclamamos pruebas que demuestren y validen el conocimiento de la profesión a la que se oposita.
- En el acceso al Empleo privado, debe cumplirse con la cuota de reserva 2%, obligatoria para las empresas que cuenten al menos con 50 trabajadores. Las medidas alternativas al cumplimiento de esta cuota que establece el Decreto 364/2005, de 8 de abril, deben quedar para casos excepcionales, y no convertirse en normas de general aplicación.
- Es necesario que se adapten los programas de Formación Profesional de Grado Medio, tal y como se lleva a cabo con los Programas de Garantía Social.
- Los Certificados de Aptitud o Capacitación Profesional deben expresarse en positivo, y reflejar las capacidades que la persona con discapacidad intelectual puede realizar, con independencia del grado de minusvalía que tenga reconocido a través del correspondiente certificado.
- Los Centros Especiales de Empleo deben servir de puente para que los/as trabajadores/as con s.D. puedan transitar al empleo ordinario.